Al confinamiento entraron siete traineras cántabras pero sólo saldrán seis. Una se ha quedado por el camino y otra ha estado a punto de hacerlo. Quien, finalmente, no saldrá a competir el próximo verano será la ‘San Ginés’ de Colindres, que ha decidido bajarse del barco y esperar a que vuelvan a venir mejores tiempos y, sobre todo, menos peligrosos. También la ‘Virgen del Puerto’ llegó a estar más en tierra que en el agua pero, después de reunirse el club con los remeros, finalmente ha decidido seguir adelante.

Los colindreses plantearon a sus remeros cuál era la situación y les preguntaron si estaban dispuestos a afrontar la temporada tal y como se había organizado la misma y con las medidas de seguridad detalladas en el protocolo de actuación. Y el resultado fue negativo. No había hombres suficientes para tripular la ‘San Ginés’ con ciertas garantías de resultar competitiva. Su entrenador estaba dispuesto pero tomaron la decisión de bajar la persiana. De este modo, Colindres cumplirá un segundo año consecutivo sin estar en la competición. En el 2019, las razones fueron bien diferentes y se debió a la destitución del entrenador Luis Andrés Rioz durante el mes de enero. Entonces, los remeros amenazaron con seguirle si no le reincorporaban al equipo y, al no moverse el club de su postura inicial, todo se vino abajo y la trainera se quedó sin cuadrilla. Con vistas a este año, habían conseguido levantarse de nuevo y dar forma a un proyecto ilusionante al frente del cual había un tipo de garantías como Lolo Gutiérrez, pero el coronavirus lo alteró todo.

El veterano entrenador santoñés no ha esperado más y en seguida se ha subido a otro barco, que es ‘La Marinera’ de Castro, donde ya remó el curso pasado después de dejar atrás su etapa como técnico de Camargo. Volverá a ser ‘remero raso’ y ayer mismo se sumó al primer entrenamiento en el agua de los hombres de Enrique Vitoria. Tanto Castreña como Astillero dieron ayer el paso. Los rojillos ya lo tenían programado así desde el fin de semana mientras que los azules adelantaron los plazos que ellos mismos se habían marcado a principios de semana al concluir las pruebas médicas a los remeros antes de lo pensado. Los siguientes en echar el bote al agua serán los remeros de AN Castro, que tienen previsto hacerlo esta misma tarde a las ocho.

Los últimos serán los de Santoña porque ahí dentro hubo debate. El club presidido por Sergio Rozadilla fue uno de los tres cántabros, junto a Camargo y Astillero, que votó en contra del calendario y el modelo de competición planteado por la ARC en la última asamblea. Siempre se ha mostrado en contra de competir en las actuales condiciones y, de hecho, según apunta el máximo dirigente del club, tenían decidido no salir a competir. Sin embargo, es una decisión que querían consensuar con los remeros y ahí no hubo unanimidad.

«Son sobre todo los nuevos los que quieren tirar para delante», explica Sergio Rozadilla. Contaba IRC Santoña con una tripulación muy renovada respecto al curso pasado para la que había echado mano de jóvenes canteranos y también de otros deportistas que habían vuelto al remo tras un tiempo alejados de él. Y son los recién llegados los que, como cabía esperar, querían disfrutar de la experiencia de competir en una liga por muy condicionada que ésta esté. «El club no tenía intención de salir porque no le gustaba nada la idea. Y al entrenador tampoco», confiesa el presidente santoñés. De partida, uno de los que ha dicho que en estas condiciones no iba a salir con la trainera es el patrón Fernando Palacio. Y los que han decidido echarse a un lado ni mucho menos han recibido la reprimenda de la directiva: «Nosotros no queríamos convencer a nadie porque están en su derecho y porque, además, nosotros no creemos en ello y les vamos a respetar».

Tanto es así que, según destaca Rozadilla, si van a seguir hacia delante es «por los chavales y para tener remeros en el futuro». De hecho, consideran que no salir este verano podría hacer que muchos se desilusionaran o que incluso fueran a otros equipos esta misma temporada para no echar por la borda todo el trabajo realizado desde noviembre, estuvieran a gusto y luego no quisieran volver. De este modo, Santoña seguirá en pie. Lo hará con José Cuero al frente del proyecto y con un plantel que se verá reforzado por remeros que llegarán de Colindres y con los que ayer mismo se pusieron en contacto. En este sentido, que no haya salido una trainera reforzará también a las vecinas.

De este modo, en Santoña iniciaron ayer todo el protocolo de vuelta al agua. Contrataron la realización de los tests con una clínica, los harán hoy y, en principio, tenían previsto salir al agua mañana viernes para comenzar a recuperar el tiempo perdido. Durante todo este tiempo, han estado haciendo foso, pero no más porque no estaba permitido. Han decidido continuar y no hacer como sus vecinos de Colindres, cuya baja en pleno mes de junio no tendrá consecuencias disciplinarias por parte de la ARC gracias al cambio de normativa aprobado en la última asamblea y que preveía situaciones así. Es un ‘lujo’ que se pueden permitir los clubes que compiten en ARC 2 pero no los de ARC 1 porque no se les guardaría su plaza en la categoría de plata el próximo año.