El próximo fin de semana se iba a disputar en Santoña el Campeonato de Cantabria de larga distancia de traineras, pero va a tener que esperar. La cita se ha tenido que aplazar al detectarse en el seno del club organizador varios casos positivos de Covid. La pandemia parecía un fantasma del pasado pero sigue aquí, condicionando el día a día de la práctica deportiva. De este modo, ahora les tocará a los clubes y a la Federación consensuar una nueva fecha en el caso de que haya una verdadera motivación de disputar el título.

El problema con el que se pueden encontrar los organizadores del que iba a ser el primer campeonato de banco fijo del año es la dificultad de encontrar un día idóneo para celebrarlo, ya que, a partir del próximo fin de semana, habrá regatas de bateles tanto los sábados como los domingos. De hecho, el primer fin de semana con doble cita con el bote pequeño iba a haber sido el pasado, pero la prueba dominical hubo que suspenderla al haber demasiado viento en el campo de regatas de Punta Parayas.

Es una dinámica que se repetirá en cuanto haya que cambiar de tercio y pasar a las trainerillas. Habrá jornadas de la embarcación mediana todos los sábados y domingos del mes de mayo, por lo que, de primeras, parece que el campeonato, si no se quiere solapar con ninguna de las pruebas de bateles o trainerillas, se debería ir hasta el mes de junio y buscar acomodo entre las banderas Sotileza (día 5) y Bansander (día 10).

Será el sábado, aprovechando la celebración de la octava jornada de la liga de bateles, cuando los clubes se reunirán y decidirán si buscan una nueva fecha para el campeonato y, en caso afirmativo, debatirán cuál podría ser ésta. Es improbable llevarlo hasta junio, por lo que la alternativa más posible es encontrar un horario vespertino tras una de las regatas de bote corto matutinas de las próximas semanas. El primer fin de semana de abril ya está cogido por otra prueba de traineras en Colindres y, por lo tanto, la siguiente más inmediata y posible antes de que se echen encima los campeonatos de bateles sería la del nueve del próximo mes.

Fue el pasado lunes por la tarde cuando la Sociedad Deportiva Santoña envió un comunicado solicitando «el aplazamiento del Campeonato Regional de larga distancia de traineras a disputarse el día 26 tras detectarse, dentro de la plantilla, varios positivos por Covid». Además, la entidad presidida por Sergio Rozadilla afirmaba que, «una vez puesto en conocimiento de las autoridades este nuevo brote, nos aconsejan el aplazamiento de dicho evento». Y así ha sido. No habrá traineras en Cantabria este fin de semana.

Quien quiera verlas, tendrá que desplazarse a Pasajes, donde se celebrará el test que organiza San Pedro habitualmente por estas fechas para que las embarcaciones puedan contrastar su propio rendimiento con el que tienen a estas alturas de año quienes serán sus rivales en verano. Las únicas embarcaciones que estarán allí serán ‘La Marinera’ y la ‘Pedreñera’. Esta última se había movido en las últimas semanas para, precisamente, estudiar la posibilidad de que el Campeonato Autonómico de larga distancia cambiara de fecha para poder ir a las dos pruebas.

coincidencia. Ya el pasado curso coincidieron en el tiempo ambas regatas. Pedreña había sido el único que había acudido a la prueba pasaitarra en el 2020 (una semana antes del confinamiento) y también iba a haber sido la única que acudiera a la del 2021, pero finalmente no fue para cumplir con el calendario cántabro. De paso, sumó un nuevo título a sus vitrinas que todavía no tenía, ya que las dos ediciones anteriores del Campeonato de Cantabria de larga distancia las había ganado Astillero.

Cuando se aprobaron los calendarios de las federaciones cántabra y vasca, de nuevo se observó la coincidencia de ambas regatas, por lo que desde Pedreña se intentó cambiar la fecha del campeonato. Según explicó su entrenador en redes sociales el pasado fin de semana, Víctor Canal, presidente federativo, no vio impedimento alguno aunque sí precisó que debía ser algo que contara con el consenso de los clubes. Y, según él mismo contaba, la respuesta había sido negativa. Sólo Castro, que también tenía previsto acudir a Pasajes y que, de hecho, ha formalizado su inscripción para hacerlo, habría estado a favor. Con todo, desde la organización intuían desde hace un par de semanas que había posibilidades de que el campeonato quedara aplazado. Lo temible es que pueda derivar en una suspensión, como, en la práctica, ha sucedido en el País Vasco, ya que es una cita que quedó relegada a una prueba entre embarcaciones veteranas.

Para Pedreña tiene un gran «interés deportivo» acudir al test pasaitarra porque está confeccionado con tandas «distribuidas en función de las diferentes ligas», porque «dos de las doce regatas de la ARC 1 son en ese campo y formato y porque participan todos los equipos de la categoría casi al completo». Son incuestionables los argumentos para querer estar allí aunque es cierto que los clubes a los que ha sondeado este periódico no les gustaba la idea del cambio de fecha cuando, según argumentan, ésta llevaba puesta varios meses. Tampoco entendían que por el interés de uno solo se produjera la modificación cuando los demás tienen su propia planificación diseñada y los días organizados. Lo bueno es que, finalmente, ni siquiera han tenido que tomar una decisión en ese sentido, ya que ha sido el Covid quien la ha tomado por todos. Sólo cabe esperar que los positivos lo lleven de mejor manera.