Atenas estalla con el transporte parado y decena de detenciones
23:02 06/12/20
Alrededor de un centenar de personas han sido detenidas este domingo en Atenas por incumplir las medidas impuestas por el Gobierno para atajar la pandemia de coronavirus, cuando intentaban manifestarse en recuerdo de Alexis Grigorópulos, un adolescente de 15 años asesinado por un policía en 2008.
En cada aniversario de la muerte de Grigorópulos, miles de personas salen a las calles de Atenas y normalmente el día se cierra con enfrentamientos entre la Policía y los manifestantes en el barrio de Exarjia, donde el joven fue disparado y se halla una placa en su memoria.
Para evitar aglomeraciones que favorezcan la propagación de la pandemia, el Gobierno conservador de Nueva Democracia ha prohibido las reuniones de más de cuatro personas entre las cinco de la mañana y la medianoche de hoy, una medida que se suma al confinamiento parcial que desde hace un mes hay en vigor en toda Grecia.
Además, gran parte del transporte público se ha bloqueado, con el recorrido más céntrico del tranvía suspendido y el cierre de veinticuatro estaciones de metro en Atenas y algunos municipios limítrofes, aunque el sábado se anunció el cierre de solo seis de estas paradas.
A pesar de la prohibición de reuniones públicas de más de cuatro personas, muchos vecinos quisieron acercarse a lo largo del día a la placa en memoria de Grigorópulos para dejar flores, pero se encontraron con calles bloqueadas por miles de policías antidisturbios, que no les dejaron avanzar y en algunos casos los detuvieron y llevaron a comisaría.
Esta actuación ha sido criticada tanto por la oposición política como por parte de la ciudadanía, por considerar que se utiliza la pandemia como una excusa para prohibir esta y otras manifestaciones y limitar los derechos civiles.
A pesar de que la Policía ha bloqueado el paso de periodistas para cubrir la situación, circulan por medios y redes sociales vídeos de agentes lanzando granadas de aturdimiento dentro de edificios e incluso destrozando un ramo de flores dejado en memoria del adolescente asesinado hace doce años.
El 6 de diciembre de 2008, un policía disparó a un grupo de jóvenes entre los que se encontraba Grigorópulos, quien murió en el acto. Este asesinato provocó el estallido de una revuelta ciudadana que duró veinte días y se extendió por todo el país.
Las protestas no se han limitado a la capital, también se han registrado enfrentamientos y detenciones en Salónica, la segunda mayor ciudad del país, La Canea en la isla de Creta y Patras, en el Peloponeso.
El Gobierno griego ha tenido que extender una semana más el confinamiento nacional ante la presión a la que aún se enfrenta el sistema sanitario. Desde que comenzó la pandemia se han registrado 114.568 casos y 2.902 muertes por coronavirus. ![Publicidad 171034]()
En cada aniversario de la muerte de Grigorópulos, miles de personas salen a las calles de Atenas y normalmente el día se cierra con enfrentamientos entre la Policía y los manifestantes en el barrio de Exarjia, donde el joven fue disparado y se halla una placa en su memoria.
Para evitar aglomeraciones que favorezcan la propagación de la pandemia, el Gobierno conservador de Nueva Democracia ha prohibido las reuniones de más de cuatro personas entre las cinco de la mañana y la medianoche de hoy, una medida que se suma al confinamiento parcial que desde hace un mes hay en vigor en toda Grecia.
Además, gran parte del transporte público se ha bloqueado, con el recorrido más céntrico del tranvía suspendido y el cierre de veinticuatro estaciones de metro en Atenas y algunos municipios limítrofes, aunque el sábado se anunció el cierre de solo seis de estas paradas.
A pesar de la prohibición de reuniones públicas de más de cuatro personas, muchos vecinos quisieron acercarse a lo largo del día a la placa en memoria de Grigorópulos para dejar flores, pero se encontraron con calles bloqueadas por miles de policías antidisturbios, que no les dejaron avanzar y en algunos casos los detuvieron y llevaron a comisaría.
Esta actuación ha sido criticada tanto por la oposición política como por parte de la ciudadanía, por considerar que se utiliza la pandemia como una excusa para prohibir esta y otras manifestaciones y limitar los derechos civiles.
A pesar de que la Policía ha bloqueado el paso de periodistas para cubrir la situación, circulan por medios y redes sociales vídeos de agentes lanzando granadas de aturdimiento dentro de edificios e incluso destrozando un ramo de flores dejado en memoria del adolescente asesinado hace doce años.
El 6 de diciembre de 2008, un policía disparó a un grupo de jóvenes entre los que se encontraba Grigorópulos, quien murió en el acto. Este asesinato provocó el estallido de una revuelta ciudadana que duró veinte días y se extendió por todo el país.
Las protestas no se han limitado a la capital, también se han registrado enfrentamientos y detenciones en Salónica, la segunda mayor ciudad del país, La Canea en la isla de Creta y Patras, en el Peloponeso.
El Gobierno griego ha tenido que extender una semana más el confinamiento nacional ante la presión a la que aún se enfrenta el sistema sanitario. Desde que comenzó la pandemia se han registrado 114.568 casos y 2.902 muertes por coronavirus.
