El ritmo de construcción de la plantilla del Racing avanza a buen ritmo. Casi en paralelo al de la vacunación. Hace poco más de un mes que concluyó la temporada pasada y el club cántabro ha sido capaz de fichar ya a seis jugadores, algo más de uno por semana. Si mantiene esta velocidad de crucero, Guillermo Fernández Romo va a poder comenzar los entrenamientos el próximo doce de julio con buena parte de los jugadores que va a tener a su disposición durante el año ya a sus órdenes, lo que no deja de ser una ventaja. Hasta la fecha, todos esos futbolistas que ha incorporado son mayores de 23 años, lo que, sumado a los siete de este grupo de edad que mantenían contrato en vigor, resulta que ya son trece. Y, según la normativa de la Primera RFEF comunicada a los clubes, podrá haber un máximo de 17.

Esto quiere decir que Guillermo Fernández Romo aún tiene margen para contratar a otros cuatro futbolistas mayores de 23 años. El resto, de fichajes, de haberlos, tendrán que estar por debajo de este margen hasta ocupar un máximo de 23 fichas. De entre los jugadores que ya se asentaron en el primer equipo el curso pasado, hay cinco que cumplen con ese límite. Serían Álvaro Mantilla, Diego Ceballos, Martín Solar, Pablo Torre y Marco Camus. Todavía habría sitio para otro futbolista sub 23. Éste podría venir de cualquier sitio pero, teniendo en cuenta el proyecto de cantera iniciado el curso pasado que se quiere mantener en el tiempo, la intención sería cubrir este cupo con futbolistas de la casa.

A buen seguro que habrá un buen número de futbolistas de la cantera que comiencen la pretemporada a las órdenes de Guillermo Fernández Romo para darles la oportunidad de mostrarse y, si el entrenador lo estima oportuno, incluso ganarse un puesto en el primer equipo. Con todo, el hecho de que el filial vaya a jugar en una categoría también atractiva y que está sólo un peldaño por debajo de la Primera RFEF, ayudará a que pueda haber futbolistas bailando entre un equipo y otro con la intención de que mantengan su ritmo de competición y su crecimiento.

De hecho, esto último es lo que han ofrecido a algunos de los futbolistas que jugaron en calidad de cedidos el curso pasado fuera de Santander. Saúl García, que lo hizo en el Laredo, habría aceptado ya y, como el pasado año, completaría la pretemporada con el primer equipo. Lo que espera es que las lesiones y la salud le respeten un poco más. Juan Gutiérrez y Mario Musy serían los otros futbolistas que han recibido esta oferta aunque, por ahora, no han enviado una respuesta.

Para el Racing no va a suponer un problema encontrar las seis fichas sub 23 para completar la plantilla como sí lo será para otros clubes. Lo que a buen seguro deba pensar bien Guillermo Fernández Romo es en qué puestos va a invertir a la hora de utilizar las cuatro fichas de mayores sub 23 que le quedan. De hecho, esta misma semana podrían pasar a ser sólo tres si se confirma la incorporación de Pol Moreno, el central del Cornellá a quien el entrenador verdiblanco quiere traer a Santander para, de manera definitiva, dar por cerrado el puesto de central para la próxima temporada.

A día de hoy, según el estado actual de la plantilla, el Racing cuenta con dos porteros mayores de 23 años, como son Lucas Díaz y Miquel Parera, uno de los seis fichajes cerrados hasta la fecha y que procede del Mallorca. La prioridad era Ramón Juan, que, además de ser de la total confianza del técnico, ocupaba ficha sub 23. No era esto lo que movía el interés verdiblanco pero también es cierto que habría dado mayor margen de maniobra al entrenador madrileño para formar una plantilla a su imagen y semejanza.

Está por ver si el nuevo técnico verdiblanco interpreta a Mantilla como central o como lateral derecho, donde competiría por el puesto con Diego Ceballos. Ambos son los únicos sub 23, al menos hasta la fecha, que tiene la retaguardia verdiblanca. El resto son los centrales recién fichados Pablo Bobadilla y Eneko Satrústegui, además del lateral izquierdo Isma López, que es de los que continúa del curso pasado tras subirse a bordo en el mercado invernal para jugarlo todo desde ese momento.

No sería descartable que la intención del entrenador, que es también el encargado de dar forma a la plantilla, sea quedarse con Ceballos e Isma López como únicos laterales puros sabiendo que en cualquier momento puede echar mano de Mantilla para el derecho y Satrústegui para el izquierdo. Es más, para este último podría contar también con un jugador de la casa como Simón Luca, recuperado ya de la lesión que le impidió terminar la temporada pasada con el Rayo Cantabria. Ya completó la pretemporada del curso pasado y se mantuvo en la órbita del primer equipo subiendo a entrenar cada vez que fue requerido.

Tres similares. En la sala de máquinas, los jugadores que siguen siendo sub 23 son Martín Solar y Pablo Torre, que el pasado curso ya jugó con ficha del filial como otros como él lo podrán hacer este año. Los otros cuatro jugadores que, a día de hoy, tiene el equipo para jugar tanto en el puesto de medio centro como por delante son Íñigo Sainz Maza, Fausto Tienza, Sergio Marcos y Alberto Villapalos. Echando un vistazo a esta nómina, se aprecia que hay tres jugadores con un perfil muy similar, futbolistas de contención y para mantener un cierto equilibrio en el medio campo, por lo que no habría que descartar la salida de alguno de ellos.

En concreto, son Íñigo, Tienza y Villapalos los que se podrían considerar jugadores de un corte similar. Descartar al primero resultaría una contradicción evidente con el proyecto de cantera que, en teoría, se quiere potenciar desde el club y más aún tras el buen rendimiento que dio la campaña pasada. El jugador llegado del Nástic ha sido fichado, obviamente, para quedarse y, por lo tanto, queda el madrileño, incorporado el curso pasado como, en teoría, una apuesta segura tanto para la sala de máquinas como para el centro de la defensa. Sin embargo, no terminó de funcionar. Fernández Romo, que le conoce bien, no se llegó a explicar por qué no fue capaz de sacar su mejor fútbol, que sabe que lo tiene. Está por ver si le da otra oportunidad o si bien le busca una salida durante la pretemporada. De esta manera, ganaría también una ficha para mayor de 23 años en el caso de que la considere necesaria.

El Racing ha fichado hasta la fecha jugadores para el centro de la zaga, el medio campo y la delantera, pero no ha recibido aún ningún refuerzo para las bandas, ya sea para la zona de atrás o para ejercer el rol de interior o extremo. De partida, ya cuenta con un par de jugadores que ya fueron titulares el curso pasado rindiendo a un buen nivel y, cuando atravesaron su mejor momento, resultando decisivos y prácticamente imparables, como fueron los casos de Álvaro Bustos en la banda izquierda y Patrik Soko en la derecha. Ambos ocuparán ficha de mayor de 23 años porque cuentan con un año más de contrato. Por eso estarán en La Albericia el próximo doce de julio para comenzar los entrenamientos como también lo estará Marco Camus, que puede jugar en cualquiera de los dos costados. El canterano, que es sub 23, necesita jugar mucho tras pasar prácticamente inadvertido el curso pasado y comenzará la pretemporada con la intención de convencer a Fernández Romo. Con todo, parece claro que alguno de los cuatro fichajes de mayor de 23 que le quedan por hacer llegará para reforzar los extremos.

Para la delantera ya ha habido una incorporación, que es la de Carlos Castro. Se une a Cedric para, a falta, probablemente, de al menos otro delantero más, contar con una pareja que se antoja solvente de partida y que, además, estará desde el primer día de entrenamiento a las órdenes de su entrenador, que no es poca cosa. Son dos de las trece fichas para mayores de 23 años que ya tiene el Racing ocupadas.