29.03.2024 |
El tiempo
viernes. 29.03.2024
El tiempo
El Diario de Cantabria

El Racing solo carbura en El Sardinero

Imagen2
El Racing solo carbura en El Sardinero

Cinco encuentros. Tres de ellos disputados en los Campos de Sport de El Sardinero y todos ellos con resultado favorable. Y dos visitas a Vigo y a Logroño que han terminado con derrota. Ese es el bagaje de un Racing que trata de buscarse a sí mismo un año más y que anhela con que esta sea la temporada de la vuelta a LaLiga. Y que la vuelta sea para quedarse de forma definitiva. Y aunque el sacar los máximos puntos posibles en casa sea un pilar fundamental para que eso ocurra, fuera de Cantabria también hay que dar el callo. Y si no que se lo digan a Solabarrieta.

El curso se hizo complejo para los verdiblancos el año pasado. Primero en una primera fase en Segunda RFEF dominada por los filiales, pero en la que el mejor equipo a domicilio fue el cántabro. Y en la segunda fase más de lo mismo. Ni si quiera esa recta final de campeonato donde los santanderinos se dejaron ir, fue suficiente para que el Real Unión le arrebatara el ser el mejor equipo de visitante, aunque sí que le arrebató la primera plaza y le dejó sin puesto fijo para la Copa del Rey de esta campaña. Ahora, con Romo al frente, tendrán que ganárselo en la Copa Federación en un calendario sobrecargado en los próximos meses otoñales.

Fuera de casa se las verán con Racing de Ferrol, Badajoz y Real Unión de Irún en octubre. Casi nada. Y continuar con ese maleficio fuera de casa de las dos primeras visitas no sería nada beneficioso para un equipo que quiere regresar a la élite. Una élite reconvertida y que nada se parece a aquel Campeonato Nacional de Liga de Primera División estrenado en 1929 y donde estuvo el Racing. Por si a alguien se le olvida la magnitud de esta entidad. Solo que ahora mantenerse en él no es tan sencillo. Echar un vistazo a los pronósticos del descenso en España es ver a los recién ascendidos con muchas opciones de bajar de forma inmediata. Y luego cuesta mucho volver. Que se lo digan al Real.

Para eso hay que volver y cuando las sensaciones no acompañan es más difícil. En Las Gaunas ya se vio la poca capacidad de los de verde para reponerse de los golpes, encajando precisamente cuando mandaba en el partido y con una aportación de la gente del banquillo que no fue satisfactoria ni para rescatar un punto. Y ante el filial del Celta le duró muy poco la alegría de ponerse por delante gracias a Bustos, para finalmente irse diluyendo al mismo tiempo que fallaba ocasiones claras. En casa ante Tudelano y Talavera se vieron mimbres en los que poder sustentar el proyecto, pero ante el Internacional de Madrid la cosa cambió.

Patrick Soko estrenó por fin su cuenta goleadora, pero Romo mostró un plan que poco o nada gustó al público de El Sardinero. Los pitos aparecieron cuando reforzó las bandas con doble lateral frente a un equipo que solo había logrado cuatro puntos de doce posibles y que presumiblemente estará en la parte baja del grupo. Victoria y portería a cero, sí. Pero a qué precio. Al de la victoria obviamente, sin embargo, en Santander saben lo que viene por delante. Y que no será suficiente con eso. Hay que sustentar las victorias en otra cosa.

Y las rotaciones están por llegar

 

Para Romo poco a poco va a ser más complicado mirar a la bancada. Y más si lo que ve de ella es que solo empeora lo que hay en el terreno de juego. Pero quizá es simplemente ‘lo que hay’. El Racing necesita dar el callo en la Copa Federación para poder llegar a la Copa y ahí enfrentar a un Primera. Un premio que todo equipo que hace bien las cosas se merece y que hará respirar a los montañeses un aroma de otra época más que necesario para seguir creyendo en plantilla, entrenador y directiva. El Arenas es el primer obstáculo hacia ese objetivo.

Imagen1

Sin embargo, la presencia de ese torneo obligará a que el club se convierta en un equipo de Champions. No por la categoría, sino por la acumulación de partidos. Encuentros cada tres días con rivales de todo tipo y de diferentes niveles que pondrán a prueba realmente las capacidades de Guillermo Fernández de estar al frente del equipo. Las capacidades de Cedric Omoigui o Pablo Torre tendrán que encontrar su reemplazo, aunque no sabemos si tendrá que ser en liga o en torneo copero. No están demasiado claras las intenciones de Romo en ese sentido.

Y todo ello contando con que en casa necesita mantener, como mínimo, la racha de resultados. Solo ha concedido un gol y ha hecho ocho en tres encuentros. Todavía hay margen de mejora mientras se sigue de cerca a Unionistas, Deportivo o Logroñés, que ya empiezan a copar las primeras posiciones del grupo y que se postulan como rivales indiscutibles por estar la temporada que viene en Segunda División. El Racing es sexto y solo está a un punto de las posiciones de playoffs. La carrera es de fondo. Todavía no da para darse por vencido. 

El Racing solo carbura en El Sardinero
Comentarios