En un vibrante derbi que mantuvo a los aficionados al borde de sus asientos, el Rayo Cantabria logró una emocionante remontada ante la Gimnástica de Torrelavega, imponiéndose por 2-1 y consolidándose en la zona de playoffs. El encuentro, disputado en el estadio local, dejó claro que en el fútbol cántabro no hay partidos sin emoción.

La Gimnástica se adelantó en la primera parte, con un despliegue ofensivo que les brindó más oportunidades de cara a portería. Fue Miguel Gándara, el defensa blanquiazul, quien dejó a la afición con la boca abierta al marcar un golazo de chilena, adelantando a los torrelaveguenses y generando un ambiente eléctrico en el estadio.

Sin embargo, el Rayo Cantabria regresó del descanso con una mentalidad renovada y rápidamente niveló el marcador. Jorge Delgado, en pocos minutos, logró empatar el partido, desatando la euforia entre los seguidores locales.

A medida que avanzaba el encuentro, las ocasiones se sucedían para ambos equipos, pero fue el Rayo Cantabria el que se mostró más sólido en los momentos cruciales. La expulsión de Alberto Gómez por parte de la Gimnástica en el minuto 86 marcó un punto de inflexión, inclinando la balanza a favor de los locales.

El climax llegó en el minuto 92, cuando Santamaría para el Rayo Cantabria aprovechó un despiste de Sotres, portero de la Gimnástica, y coló el balón en la portería, asegurando los tres puntos para el filial racinguista y desatando la celebración en el estadio.

Con esta victoria, el Rayo Cantabria se mantiene firmemente en la lucha por los playoffs, mientras que la Gimnástica de Torrelavega se complica aún más la vida al permanecer en puestos de descenso.