Hoy es un día importante para la gestación de la nueva categoría en la que jugará el Racing la próxima temporada. Se reunirán los dioses del olimpo, los dueños del chiringuito y los que cortan el bacalao, los mismos que se han inventado una competición que, en la práctica, complica los sueños a los humildes y que, salvo que se imponga un control similar al de La Liga, puede derivar en unos agujeros económicos importantes. Sobre todo, porque, al menos de partida, no parece que vaya a suponer unos ingresos extra para los clubes respecto a los que había en Segunda B mientras que los viajes van a ser más largos con más noches de hotel y la competitividad se van a elevar, lo que se nota ya en el mercado. Da la sensación de que todo se ha hecho demasiado deprisa para aprovechar la posibilidad que brindó la pandemia de reorganizar el fútbol ‘amateur’ y, por lo tanto, es posible el debut de la Primera RFEF se produzca con muchas tareas pendientes.

Es algo de lo que se hablará hoy a partir de las once de la mañana en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas, donde están citados dirigentes de los cuarenta clubes que tomarán parte de la competición la próxima temporada. La Federación pretende avanzar en la confección de la misma ofreciendo más detalles de cómo se va a disputar. Y algo que quedó en el aire en la anterior reunión fue la venta de los derechos televisivos, que parecía que iba a ser el pastel que se iban a repartir los elegidos.

Durante todo el año se prometieron ingresos por esta vía se iban a multiplicar respecto a la Segunda B pero eso es algo que, a día de hoy, y salvo que Luis Rubiales explique otra cosa, todavía no han conseguido poner en práctica. En su día, el Racing ya emitió un consentimiento a la Federación para que negociara de manera conjunta los derechos televisivos. Era éste el sueño húmedo del organismo presidido por Luis Rubiales para hacer lo mismo que La Liga y sacar un mayor rédito económico. Sin embargo, no todos han seguido la senda del club cántabro. Como ya se había advertido desde un principio, el gran problema podría estar en los filiales y, al parecer, serían el Madrid y el Barcelona, cuyos dependientes jugarán en Primera RFEF, los que más problemas habrían puesto. Tanto es así, que día de ayer se antojaba complicado por compromisos ya pactados previamente y la única solución intermedia sería vender los derechos por paquetes, pero no habrá una misma plataforma televisiva que emita todos los partidos.

Aún queda mucho verano por delante en el que las cosas pueden cambiar, pero es posible que para ver los partidos de Primera RFEF haya que echar mano, una vez más, de las televisiones autonómicas, de Youtube, de servicios que tengan los propios clubes y, quizá, también de Footters.

Está por ver. Lo que descarta el hecho de no contar con una negociación centralizada de los derechos es convertir la televisión en una importante fuente de ingresos a corto plazo. Va a haber que rascarse el bolsillo tanto o incluso más que en cualquier otra temporada en la categoría de bronce. A la hora de buscar más ingresos, también trabajarán durante el verano en la Federación por poner un nombre comercial a la competición, lo que supone un patrocinio privado como La Liga lo tiene con el Banco Santander.

Otra manera de hacer caja que contemplan en Las Rozas es la disputa de la fase de ascenso en una sede única para conseguir un buen dinero de ayuntamientos, de la diputación o del Gobierno autonómico de turno, como sucedió con Extremadura en el último playoff. Sin embargo, eso conllevaría que los clubes se quedaran con una siempre fundamental fuente de ingresos como son las taquillas de esos partidos decisivos, por lo que en este asunto podrían (deberían) encontrarse voces en contra. El Racing, por ejemplo, ha llegado a vender casi veinte mil localidades en partidos de playoff en Los Campos de Sport, lo que supone unos ingresos que pueden significar un buen porcentaje de su presupuesto. Renunciar a ello no debería estar en el guión porque esos partidos decisivos también son importantes para la afición, que esos días ve recompensada toda una temporada en el infierno, y es también importante para la ciudad por todo lo que arrastran.

En la reunión anterior ya se especificó que la categoría estaría formada por dos grupos, la composición de los cuales también se pondrá hoy encima de la mesa. Ya es seguro que el campeón de cada uno de ellos ascenderá de manera automática y que los que queden segundos, terceros, cuartos y quintos disputarán el playoff para aprovechar las otras dos plazas que quedarán vacantes hacia la categoría de plata. Por el otro lado, está previsto que cinco equipos queden condenados al descenso, lo que hará que el 25% de los equipos bajen a Segunda RFEF. Son muchos, eso exigirá no descuidarse y, además, conseguirá que sea muy difícil no jugarse algo, ya sea por arriba o por abajo. El número de fichas de mayores de 23 años que se podrán tener en las plantillas también es algo que quedará fijado hoy, ya que es una cuestión fundamental a la hora de ir conformando los diferentes proyectos y los directores deportivos lo tienen que tener claro. En la anterior reunión, se habló de un máximo de quince aunque hoy podría debatirse la posibilidad de subirlo.