El Levante ha celebrado este sábado, en la vigésima jornada, su primera victoria en LaLiga Santander de la temporada después de imponerse al RCD Mallorca (2-0), un duelo en el que los goles de Roberto Soldado y de José Luis Morales permiten al conjunto granota recobrar la esperanza en la salvación, mientras que la Real Sociedad ha interrumpido su mala racha ante el RC Celta (1-0).

Nueve meses después, el cuadro de Alessio Lisci ha vuelto a conquistar los tres puntos y ha desatado la euforia en el Ciutat de València, que empieza a recuperar la fe. Con 11 unidades, los puestos de permanencia están a solo cinco justo cuando acaba de iniciarse la segunda vuelta del campeonato.

Todo en un encuentro con unos primeros 45 minutos en los que ambos se neutralizaron, con el joven portero Leo Román desbaratando las pocas ocasiones de las que gozaron los locales y con Take Kubo llevando la manija de los bermellones.

Fue nada más regresar de vestuarios cuando en un contragolpe Roberto Soldado se encargó de adelantar a los de Alessio Lisci (min.46), que se despojaron de la presión y que a punto estuvieron de incrementar su renta cinco minutos más tarde en un disparo de Roger Martí al palo.

Ya en el descuento, el 'Comandante' sentenció la contienda y endosó la tercera derrota consecutiva al equipo de Luis García Plaza, que se queda con solo cuatro puntos de renta sobre la zona de quema.

LA REAL RECUPERA LA ALEGRÍA PARA ARRANCAR LA SEGUNDA VUELTA

Posteriormente, la Real Sociedad, que acumulaba seis encuentros ligueros sin ganar, se ha impuesto con un solitario gol de Mikel Oyarzabal al Celta (1-0) y ha regresado momentáneamente a la zona 'Champions' de la tabla.

A los 11 minutos, el internacional español se plantó ante Matías Dituro, que desvió su primer remate, y recogió el rechace para anotar a puerta vacía. El guardameta argentino todavía evitó el segundo de Oyarzabal en el 20 y otro de Elustondo seis minutos más tarde.

El propio defensa 'txuri-urdin' vio puerta en la reanudación, justo después de un balón al larguero de Merino, pero el colegiado anuló el gol por fuera de juego. Rafinha, que debutaba en el cuadro vasco ante su exequipo, perdonó la sentencia en un cabezazo que se marchó rozando el palo.

Solo Santi Mina, con un remate cerca del larguero en el descuento, inquietó a una Real que ahora es cuarta con 33 unidades. Los gallegos (23), por su parte, interrumpen una serie de dos victorias seguidas y tres partidos puntuando.