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El Diario de Cantabria

Amigos necesitados

Ambos equipos tendrán que hacer frente a un buen número de bajas | Se espera un partido diferente al que ambos completaron en San Lorenzo en la primera vuelta

Iñigo Sainz Maza estrecha la mano de Borja Ares tras el partido de la primera vuelta entre Racing y Laredo disputado en San Lorenzo. / ALERTA
Iñigo Sainz Maza estrecha la mano de Borja Ares tras el partido de la primera vuelta entre Racing y Laredo disputado en San Lorenzo. / ALERTA
Amigos necesitados

Al Racing y al Laredo les gustaría darse la mano, firmar tablas, llevarse a casa un punto cada uno y quedar como amigos. De esta manera, todo serían sonrisas y no habría malos rollos, pero ni uno ni otro se pueden permitir semejante gesto de generosidad. Ninguno de los dos están como para firmar armisticios. No pueden, no se lo pueden permitir. Ambos necesitan ganar para acercarse a sus respectivos objetivos, que son bien diferentes pero igual de ilusionantes. A nadie le sobra nada y eso añade una buena dosis de pimienta a un derbi que ni mucho menos es de rivalidad, ya que el duelo vecinal entre pejinos y capitalinos apenas tiene bibliografía previa. No hay historias que contar, será sólo la segunda vez que se vean las caras en Los Campos de Sport y de la primera hace sesenta años. Por eso la cita se parece más a la fiesta que podría haber sido de no estar todos amarrados por la maldita pandemia y por eso el deseo de muchos sería encontrar la manera de que ambos equipos se marcharan satisfechos. Pero ahora mismo, eso es imposible.

Al Racing sólo le vale ganar porque juega en casa, es teóricamente superior y no tiene margen de error para alcanzar su objetivo. Sólo le valen los tres puntos. De ahí que cualquier otra combinación suene a fiasco y a paso atrás prácticamente definitivo. Seguramente el Laredo firmaría un empate de partida porque se sabe inferior, porque no tiene necesidad de remontar para alcanzar su objetivo básico y porque su trayectoria a domicilio hasta la fecha no le permite jugar a ser demasiado ambicioso. Todo lo bien que lo está haciendo en el presente curso se está fundamentando sobre su buen hacer como local, ya que cada vez que ha tenido que coger el autobús ha vuelto con malas noticias. Sólo ganó en La Florida. En los otros seis desplazamientos que ya ha realizado, ha recibido una derrota. Menos mal que es un seguro en San Lorenzo.

De allí sólo fue capaz de rescatar un punto el Racing. Y gracias porque lo cierto es que el ‘Charles’ dio muestras de ser superior durante buena parte de la contienda. Es difícil creer que el partido de hoy se vaya a parecer a aquel porque no es lo mismo jugar en San Lorenzo que en Los Campos de Sport. Incluso el equipo verdiblanco, como reconoció Manu Calleja el pasado viernes, es otro. Parece que por fin ha encontrado la manera de sentirse protagonista con el balón y a partir de ahí quiere ir sometiendo a un Laredo que buscará dibujar un partido largo.

Lo malo es que se le puede hacer muy largo porque el de hoy será el tercer partido en una semana. Y eso pesa. Más aún, a un equipo con una plantilla corta, ya que Manu Calleja viene utilizando a unos 16 futbolistas,nomás.Ylomaloesquenova a poder contar con cuatro de ellos, como son los sancionados Óscar Siafá y Felipe Peredo ni los cedidos por el Racing Miguel Goñi y Saúl García. También será baja, aunque no está entre ese núcleo duro de jugadores antes mencionado, Diego Portilla. La duda la ha puesto en los últimos días Borja Ares, que recibió el alta médica a mitad de semana y completó el jueves su primer entrenamiento. Entrará en la lista sin apenas haberse rodado pero su equipo le necesita.

Tiene Manu Calleja, por lo tanto, a los hombres justos para afrontar el encuentro, por lo que el paso de los minutos puede ir en su contra a no ser que tenga delante algo tan ilusionante que haga sacar fuerzas de donde no parece haberlas. La ilusión puede con todo. Y para alimentarla necesita un buen inicio de partido para olvidar la decepción que supuso volver de vacío de Barakaldo el pasado miércoles cuando había merecido bastante más.

El Racing también tendrá un buen número de bajas para, en cierta medida, intentar compensar las que sufrirá su rival. Nunca será lo mismo porque cuenta con una plantilla mucho más profunda que la que tiene el Laredo, pero con eso se va a tener que conformar éste. Las ausencias se ceban con el centro de la defensa, donde no podrán jugar ni Matic ni el recién llegado Lars Gerson, que no llegó a romperse pero sí sintió un aviso que le hizo frenar y no entrenar durante la semana. Esto quiere decir que Solabarrieta sólo dispondrá de Mantilla y de Óscar Gil aunque mantiene la carta de Villapalos, que seguramente comience el encuentro en el banquillo.

El Racing llega con una dinámica ganadora después de haber sumado diez de los últimos doce puntos y haber encadenado dos derrotas consecutivas por segunda vez en toda la temporada. Así de bajo estaba el listón. Sin embargo, no se puede fiar el equipo verdiblanco de la inercia que lleva porque ésta se vio interrumpida al tener que parar el fin de semana pasado por obligado descanso. Las incógnitas vuelven a estar ahí cada vez que hay que volver a poner el motor en marcha. El equipo de Solabarrieta arrancará con confianza pero también con la mosca detrás de la oreja.

Los otros dos jugadores que causarán baja en el Racing fueron titulares en el último partido. Uno es Marco Camus, que ha sufrido una pequeña rotura y que fue quien jugó por banda izquierda contra el Leioa. A cambio, recuperará su sitio Álvaro Bustos, que tendrá que jugar con una férula especial que proteja su muñeca lesionada. Antes de pasar por quirófano, algo que sucedió hace poco más de dos semanas, era el jugador más en forma del equipo y bueno sería que lo siguiera siendo en su vuelta. Como novedad, esta vez tendrá guardándole las espaldas a un futbolista que ha de ser todo un seguro como Isma López y que, tras otras dos semanas de trabajo en el equipo, a buen seguro que enseñará más de lo que enseñó en su debut.

Otro que estaba en un buen momento es Jon Ander, pero éste ha sido víctima de una lumbalgia muy dolorosa que no le ha dejado entrenar. De este modo, Solabarrieta tendrá que elegir entre darle ya la alternativa a Luan Capanni o dar otra oportunidad a Cedric. Todo apunta a lo primero porque, de hecho, entró antes que su compañero en el duelo contra el Leioa. Además, un fichaje invernal siempre comienza con ventaja porque hay ganas de dar sentido a su fichaje. Apenas enseñó nada en sus primeros minutos como racinguista pero el brasileño podría tener hoy la primera oportunidad de, verdaderamente, justificar su incorporación.

Otra duda estará puesta en la media punta, entre Cejudo y Pablo Torre. Van a acabar jugando los dos pero falta saber quién comenzará antes. Nadie va a descabalgar a Soko de la banda derecha y es improbable que Nana vuelva a sentar a Iñigo después del gran encuentro que éste completó contra el Leioa. Sin duda que Solabarrieta tiene alternativas y deberá dar forma al puzzle teniendo en cuenta que el Laredo levaadarelbalón,porloquenecesita tener en el terreno de juego a jugadores que sepan qué hacer con él. En San Lorenzo era fácil que se impusiera el mayor físico del equipo de Manu Calleja pero el equipo de la capital debería hacer valer su personalidad para sacar el encuentro adelante. Tiene mucha necesidad acumulada.

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