Los alumnos del Conservatorio no renuncian a sus sueños
«Son momentos complicados para todos» y especialmente para los alumnos del Conservatorio municipal de Santander
La música y las clases del Conservatorio municipal Ataúlfo Argenta continuarán su ritmo habitual gracias a la adaptación de las instalaciones y a la concienciación del alumnado que cumple rigurosamente los protocolos de seguridad establecidos por las autoridades sanitarias.
Así lo ha destacado la concejala de Educación, Noemí Méndez, quien ha felicitado tanto al equipo docente del Conservatorio municipal como a sus alumnos por su gran capacidad de adaptación y su tenacidad a la hora de hacer frente a la covid-19 sin renunciar a sus sueños.
Méndez ha destacado que «son momentos complicados para todos» y especialmente para los alumnos del Conservatorio «que llevan años compaginando sus obligaciones escolares con esta disciplina artística, por lo que su adaptación ha sido doble».
«En una situación anormal como la que vivimos intentamos que todo sea lo más llevadero posible y por eso mismo queremos que los chicos sigan con sus clases, aprendiendo y disfrutando de la música», ha indicado.
La edil ha explicado que este centro municipal, cuyo calendario depende de la Consejería de Educación del Gobierno de Cantabria, no ha paralizado su actividad desde la declaración del estado de alarma, excepto en la época estival y los periodos no lectivos, ya que desde un primer momento se impartieron clases telemáticas para que los alumnos pudiesen afrontar la recta final del curso.
Méndez ha explicado que el curso 2020-2021 dio comienzo el pasado mes de septiembre de forma presencial y con algunas adaptaciones como la reducción de ratio por aula y profesor, la adaptación curricular de algunas de las asignaturas y la combinación de clases online y presencial en caso de que el alumnado o profesorado se encuentre en cuarentena o haya dado positivo en covid-19.
Todas estas medidas se suman a las ya consolidadas e integradas en todos los espacios municipales de la ciudad como son el distanciamiento social, la limpieza de manos, el uso obligatorio de mascarilla o la ventilación permanente.
La edil ha explicado que se ha dotado al centro educativo de 25 mamparas plegables que permiten su uso en diferentes aulas, así como de mamparas fijas de metraquilato en el aula de informática, y de mascarillas para el personal del centro y los alumnos que lo necesiten.
En cuanto a la adaptación curricular de algunas asignaturas, Méndez ha detallado que por ejemplo los alumnos de Coro se han dividido en grupos de 15 personas y reciben sus clases en el salón de actos, que tiene capacidad para 100 personas, con las ventanas abiertas de forma permanente y el uso de mascarilla.
Por su parte, los alumnos de cuerda de la Orquesta también han sido divididos en grupos de 13 y 14 alumnos y reciben las clases con mascarilla, mientras que las asignaturas que requieren instrumento de viento se imparte con mamparas plegables.
Respecto a la Banda, en la que intervienen 60 instrumentos de viento y percusión, se ha acordado adaptar las 45 horas lectivas del año en 3 encuentros presenciales que tendrán lugar en el Palacio de Congresos y Exposiciones de Santander.
El primero de estos encuentros se celebrará los días 27, 28 y 29 de noviembre, mientras que los siguientes se realizarán en el segundo y tercer trimestre del curso.
Por último, Méndez ha lanzado un mensaje de esperanza e ilusión a estos jóvenes que «han encontrado en la música su inspiración y apoyo para evadirse de los problemas», así como a sus familias «por seguir creyendo en sus sueños y respaldando este tipo de educación».