El Gran Premio de Lieja-Bastoña-Lieja vio el dominio absoluto de Tadej Pogacar, quien logró una victoria magistral al imponerse en solitario tras un ataque decisivo en La Redoute, a unos 30 kilómetros de la meta. Este triunfo marca su segunda victoria en Lieja y su sexto monumento en la historia del ciclismo.

La carrera estuvo marcada por una estrategia calculada por parte del equipo UAE, que confió en el potencial de su líder para llevarse la victoria. A diferencia de otras competiciones de primavera, esta vez el ritmo fue más controlado, permitiendo a Pogacar desplegar su estrategia con maestría.

Desde el inicio, la carrera estuvo influenciada por el clima frío y amenazante, con la amenaza de aguanieve presente en el ambiente. A medida que la carrera avanzaba, se produjeron varios momentos de tensión, incluyendo una montonera brutal que dividió el pelotón y dejó rezagados a varios favoritos, entre ellos Mathieu Van der Poel.

A pesar de los esfuerzos de algunos ciclistas por activar la carrera, como Pidcock en Stockeu, fue en La Redoute donde Pogacar decidió tomar las riendas de la carrera y lanzar un ataque demoledor que le permitió distanciarse del resto de competidores con una facilidad impresionante.

Con una actuación dominante, Pogacar cruzó la meta en solitario, demostrando una vez más su superioridad en el mundo del ciclismo. Detrás de él, Romain Bardet logró asegurar la segunda posición, mientras que Van der Poel protagonizó una remontada impresionante para completar el podio en tercer lugar.

Con esta victoria, Pogacar ajusta cuentas con Lieja y continúa acumulando éxitos en su carrera. Ahora, su atención se centra en el próximo desafío: el Giro de Italia, donde buscará mantener su racha triunfal y seguir dejando huella en el mundo del ciclismo.