24.04.2024 |
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La semana que viene se inicia la vacunación a los grandes dependientes

En Cantabria se han administradO 16.524 dosis de la vacuna, lo que supone un 87,5% de las 18.870 recibidas. Zuloaga ha recordado que se pretende finalizar este domingo la vacunación en las residencias y acabar con el cien por cien de las dosis que se han recibido, a la espera de que el próximo lunes lleguen otras 7.000

La semana que viene se inicia la vacunación a los grandes dependientes

Cantabria prevé empezar la semana que viene con la vacunación de los grandes dependientes que no están en centros, que se hará a través del sistema de atención primaria y desplazando personal a los domicilios para vacunar a la persona dependiente y al cuidador. Así lo ha anunciado el vicepresidente y portavoz del Gobierno, Pablo Zuloaga, en la rueda de prensa para informar de la reunión del Consejo de Gobierno, que ha aprobado retribuir con 1,1 millones de euros la actividad extraordinaria del personal implicado en la vacunación contra la covid-19, mediante el complemento de productividad variable.

De esa cantidad se destinan 900.000 euros para atención primaria, 150.000 para el personal del hospital Valdecilla, 60.000 para el Sierrallana y 30.000 para el hospital de Laredo. En Cantabria se han administrado un total de 16.524 dosis de la vacuna, lo que supone un 87,5 por ciento de las 18.870 vacunas recibidas.

Zuloaga ha recordado que se pretende finalizar este domingo la vacunación en residencias y acabar con el cien por cien de las dosis de las vacunas que ha recibido, a la espera de que el lunes lleguen otras 7.000. El miércoles se acudió a vacunar a un total de 50 centros en Cantabria, de forma que entre residentes y trabajadores se ha vacunado a 6.823 personas. En lo que queda de semana está prevista la vacunación en otras 16 residencias de mayores y en varios centros residenciales de personas con discapacidad.

A partir del lunes se prevé vacunar a 4.300 personas, entre grandes dependientes y sus cuidadores. Si es posible, se les administrará la vacuna en los consultorios o centros de salud, y en el caso de que no puedan desplazarse, el personal sanitario acudirá a sus domicilios para ponérsela.

Asimismo, la semana que viene se va a administrar la segunda dosis en el CAD de Cueto, el centro en el que arrancó la campaña de vacunación en Cantabria el pasado 27 de diciembre. También comenzará la próxima semana la vacunación en los centros sanitarios privados, como Mompía, Mutua Montañesa y Santa Clotilde. Preguntado por el cambio de ritmo en la campaña de vacunación en Cantabria, Zuloaga indicó que el consejero de Sanidad, Miguel Rodríguez, ha sido «muy claro en sus explicaciones» y que el Gobierno de Cantabria ha reconocido que la campaña arrancó con «un ritmo lento».

Y, según el vicepresidente, la lentitud en ese arranque era algo «previsto y previsible» porque lo que primaba en esos primeros momentos era la formación y coordinación de los equipos sanitarios encargados de administrarla para que «todo funcionase como debería».

Ha señalado que el mismo lunes de la semana pasada Sanidad ya anunció que el ritmo «iba a aumentar de manera exponencial y así fue». También la vacunación en el hospital Valdecilla, ha apuntado, ha contribuido a aumentar el ritmo. «La buena organización del equipo de Rafael Tejido en Valdecilla ha permitido que Cantabria también agilizara en blindar a los profesionales, que afrontan esta tercera ola teniendo que tomar muchas decisiones sobre la organización del hospital. Tenerlos protegidos es a día de hoy una garantía para nuestro sistema sanitario», ha destacado. Sobre el cambio al frente en la Dirección General de Salud Pública tras el cese de Paloma Navas y el nombramiento de Reinhard Wallmann, ha resaltado que la transición se hecho con «absoluta normalidad» y que «en ningún momento se ha bajado la guardia» en el control de la epidemia en Cantabria.

Según Zuloaga, el nuevo director general está trabajando intensamente con su equipo y con el Servicio Cántabro de Salud «para coordinar tanto las nuevas medidas que entran en vigor este sábado como el seguimiento de la campaña de vacunación «con absoluta transparencia».

A su juicio, el Gobierno «ha sido claro explicando y agradeciendo» el trabajo de Paloma Navas en su etapa al frente de Salud Pública y también explicando que el objetivo del cambio es avanzar en la campaña de vacunación, mientras se mantiene a raya la incidencia del virus. Wallmann cifró ayer miércoles en 58 los casos de la nueva cepa británica del virus confirmados hasta el momento en Cantabria, mientras que horas después del Ministerio de Sanidad señalaba que en toda España se había detectado un centenar.

Preguntado por esa contradicción en los números, Zuloaga ha defendido los datos que ha aportado el director de Salud Pública, que se basan en los estudios de los rastreadores y en la información que llega de todo el Sistema Cántabro de Salud (SCS).

Ha reconocido que incluso en los datos de vacunación hay discrepancias porque existe un desfase entre los del SCS y el Ministerio, que de hecho ya se evidenció en las olas anteriores al contabilizar el número de fallecidos por la pandemia.

SATSE. El sindicato de enfermería Satse ha agradecido que los profesionales sanitarios reciban una compensación por la campaña de vacunación contra la Covid, pero ha exigido al Gobierno de Cantabria que la retribución extraordinaria se extienda a todo el personal sanitario.

Satse ha reaccionado así a la aprobación en el Consejo de Gobierno de una retribución de 1,1 millones para el personal implicado en la vacunación, mediante el complemento de productividad variable, según ha anunciado el vicepresidente, Pablo Zuloaga, en la rueda de prensa para informar sobre los acuerdos del Ejecutivo.

El sindicato critica, en un comunicado, que no se compense también a las enfermeras de las UCI, Atención Primaria y otras unidades, que «llevan desde marzo doblando turnos, sin poder disfrutar de su descanso y realizando un esfuerzo excesivo».

«No estamos en contra de cualquier compensación económica que puedan recibir los profesionales sanitarios pero no debemos de olvidar que la vacunación es solo una parte del trabajo para la lucha contra la Covid», afirma la secretaria autonómica de Satse, Ana Samperio.

El sindicato defiende así que las compensaciones «deben ser para todos los profesionales que se están dejando la piel desde marzo» y no solo para las vacunaciones.

Según Satse, las enfermeras de la UCI llevan más de 200 horas de excesos de jornadas y a las de plantas Covid y no Covid, matronas y fisioterapeutas, con cambios se turno, se les exige «un rendimiento profesional sin igual», y no han recibido compensaciones a cambio.

«En Atención Primaria se han hecho autocoberturas así como la propia cobertura de vacaciones entre los profesionales del SUAP y 061 sin ninguna compensación», añade.

Satse destaca además que en agosto solicitó la convocatoria de una mesa sectorial para tratar, entre otros asuntos, la necesidad de compensar a todos los profesionales sanitarios, sin obtener una respuesta de la administración.

MASCARILLAS. La Delegación del Gobierno ha repartido 158.000 mascarillas quirúrgicas al personal de los servicios esenciales de las entidades locales y sociales de Cantabria. Este nuevo reparto de mascarillas, impulsado por los ministerios de Política Territorial y Función Pública y de Sanidad, se ha sumado a los efectuados en mayo, septiembre y noviembre, lo que ha supuesto un total de 574.955 mascarillas distribuidas en Cantabria entre las entidades locales y sociales, según indica la Delegación del Gobierno en nota de prensa.

La delegada del Gobierno en Cantabria, Ainoa Quiñones, ha señalado que «una vez más, el Gobierno de España muestra su compromiso con las entidades y asociaciones que atienden a las personas más vulnerables», que es a quienes se ha dirigido este reparto que se llevará a cabo la próxima semana.

Para la distribución de este material de protección entre los colectivos vulnerables, se ha contado con la colaboración de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y las organizaciones Cáritas, Cruz Roja y Cermi, a las que en esta ocasión se ha sumado la EAPN. Quiñones ha reiterado que «la participación activa de los ayuntamientos y las entidades locales en la promoción y la protección de la salud pública es esencial».

En este sentido, ha recordado que desde que se decretó el primer estado de alarma el Gobierno de España ha distribuido en Cantabria 657.000 mascarillas directamente a la ciudadanía.

Primera barrera. «Desde el comienzo de la crisis sanitaria, los ayuntamientos y las entidades sociales han sido una primera barrera contra el virus», ha asegurado Quiñones, quien ha destacado a su vez que el Gobierno de España «quería que en esta crisis no se dejara a nadie atrás, protegiendo desde el principio a los más vulnerables».

Por ello, ha subrayado la intención del Gobierno central de abastecer «permanentemente» desde marzo a ayuntamientos, entidades y organizaciones sociales de material higiénico sanitario. «No queremos que esta crisis aumente la brecha de la desigualdad, ni tampoco que los más vulnerables no puedan protegerse por falta de recursos», ha concluido.

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