El debate de dos iniciativas sobre transfuguismo ha elevado la tensión entre los diputados que han intervenido este lunes en el pleno del Parlamento cántabro, que, a falta de tres meses para las elecciones municipales y autonómicas, ha rechazado esta práctica.

Los grupos que apoyan al Gobierno cántabro, PRC y PSOE, que han presentado las dos proposiciones no de ley, han sacado adelante junto a Ciudadanos esas iniciativas parlamentarias para rechazar el transfuguismo, que no han contado con el apoyo ni del PP ni de Vox, en un debate en el que se han sucedido las acusaciones cruzadas entre unos partidos y otros de acudir a esta práctica.

La propuesta del PRC exige que no se incluyan tránsfugas en las próximas listas electorales y los socialistas reclaman que las distintas formaciones políticas con representación parlamentaria no se beneficien de los votos de las personas así consideradas de acuerdo con el Pacto Antitransfuguismo «para construir, mantener o cambiar las mayorías en gobiernos locales». También se pide una revisión y reapertura del pacto para poder incluir nuevas formaciones políticas.

El portavoz del PRC, Pedro Hernando, ha acusado al PP de hacer «silencio positivo» respecto al transfuguismo. «Siempre que se callan es porque tiene un caso a las puertas», ha reprochado Hernando, convencido de que el PP presentará en Guriezo y Ruente a candidatos «transfugas», este último un caso que el Partido Regionalista de Cantabria denunciará ante la comisión de seguimiento del Pacto Antitransfuguismo.

A juicio de Pedro Hernando, la ciudadanía percibe que si al PP «le hicieran falta diputados para conseguir mayorías, recurriría al transfuguismo», como también ha opinado la portavoz del PSOE, Noelia Cobo, quien ha advertido de que los populares cuentan con «una agenda oculta» para contar con tránsfugas en Cantabria.

«Tengo la impresión de que si no les da para sumar con sus camaradas de la ultraderecha, mucho me temo que se utilicen todas las argucias para acceder a los gobiernos locales», ha pronosticado Cobo.

El PP acusa. Lo ha negado el portavoz del PP, Íñigo Fernández, quien ha acusado a PRC y PSOE de haber acudido al transfuguismo en Piélagos, Sámano, Tudanca o en la aprobación de los presupuestos regionales de 2018 gracias al voto a favor de Juan Ramón Carrancio, diputado que perteneció Ciudadanos antes de pasar a no adscrito, como esta legislatura ha ocurrido con Marta García. Fernández ha criticado que el PRC «lo ha construido Revilla a costa de coger retales de los demás», y ha justificado la negativa popular a la propuesta de los regionalistas -se ha abstenido en la otra- en que busca «retorcer» el Pacto, mientras que el portavoz de Ciudadanos, Félix Álvarez, se ha sumado a las críticas al PP. «Aquellos que amparan el transfuguismo no pueden dar lecciones de nada porque están favoreciendo una lacra que modifica la voluntad de los electores», ha reprochado.

Cristóbal Palacio (Vox) ha opinado que «muchos» alcaldes del PRC se irán al PP por las supuestas irregularidades en las adjudicaciones del servicio de carreteras de la Consejería de Obras Públicas, gestionada por los regionalistas, y ha llamado «ejemplo de tránsfuga» al consejero de Desarrollo Rural, Guillermo Blanco (PRC), quien en 1995 fue concejal del PP en Suances, ha apostillado después Íñigo Fernández.

Precisamente tras la intervención de Íñigo Fernández, al que es habitual que el presidente de la Cámara, el socialista Joaquín Gómez, llame a terminar de hablar por haber excedido el tiempo, ha llegado el momento de mayor tensión de la tarde.

Gómez le ha pedido detenerse mientras el popular reprochaba al PSOE que por culpa de los pactos del Gobierno central «esté en la calle» Javier García Gaztelu (Txapote).

«Ya veo que hay cosas que se dicen que duelen», ha dicho Fernández, a lo que el presidente del Parlamento ha respondido que ya siente que de nuevo tenga que cortarle cuando está hablando de Txapote, pero «siempre se desvía del tema». «Si a mí no me molesta el señor Txapote, no tengo ningún problema, lo mismo que ustedes pueden pactar con Vox sin ningún problema», ha afirmado Gómez, dirigiéndose a la bancada del PP. En ese momento se ha levantado de su escaño Cristóbal Palacio, quien ha considerado «inaceptable la comparación». «Me ofende usted si compara a un terrorista con un partido democrático», ha dicho Palacio al presidente de la Cámara, quien le ha llamado al orden hasta en dos ocasiones por no tener la palabra.

Tras insistir Palacio en que retirara esa expresión, y negarse Gómez a hacerlo, el popular Íñigo Fernández se ha sumado a esa petición y ha sido entonces cuando, a instancia del PP, ha decidido retirarla.