Víctor Reinoso, alcalde de Cabezón de la Sal (PRC), ha anunciado que esta semana concluirán las obras de mejora de la Urbanización de El Concejero que, en su primera fase, afectan al saneamiento, separación de aguas limpias, reforma del sistema de alumbrado público, incluyendo el cambio al sistema Leb y la urbanización. Los últimos trabajos consisten en las plantaciones arbóreas. En esta primera fase de la rehabilitación integral se han invertido 165.289 euros.

Las obras se iniciaron por la zona más próxima al Centro Comarcal de Salud, donde se renovó el saneamiento, se asfaltó y se habilitaron nuevos aparcamientos para lo cual ha habido que reordenar las zonas ajardinadas.

Esta urbanización situada en la margen derecha de la carretera de Cabezón de la Sal a Cabuérniga, entre el Centro Comarcal de Salud y la Residencia de Ancianos de Carrejo, fue en el año 2012, objeto de diversos trabajos de mejora de la red de distribución de aguas y del asfaltado de sus calles, algunas de las cuales presentaban un mal estado.

La Cabroja. Por otro lado, el Ayuntamiento cabezonense acometió, el año pasado,  obras de mejora de la Urbanización La Cabroja, que se ejecutaron de acuerdo a un proyecto presupuestado en 193.543 euros. El proyecto fue financiado al 70 por ciento por la Consejería de Obras Públicas y Vivienda, corriendo el 30 por ciento restante por cuenta del Ayuntamiento.

La zona interior de la Urbanización La Cabroja fue objeto de una remodelación, con lo que se ganaron plazas de aparcamiento, y se suprimieron espacios ajardinados que dificultaban el tránsito de peatones. Con la reforma se generaron 1.800 metros cuadrados para destinarse a zonas de esparcimiento. También, se mejoró la eficiencia energética, sustituyéndose las antiguas luminarias por otras de tecnología Led.

Por otro lado, se renovaron las redes de saneamiento, separándose las pluviales de las residuales. Dos mil metros cuadrados han sido acondicionados para zonas verdes y, a la vez, se mejoró la movilidad peatonal al crearse un espacio continuo y longitudinal. El espacio ubicado entre las dos alineaciones de viviendas está ahora sin barreras arquitectónicas.