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El Diario de Cantabria

Los mayores están "bien atendidos" en las residencias

Los mayores están "bien atendidos" en las residencias
El Gobierno cántabro subraya el "excelente trabajo" de los centros y residencias de mayores y su colaboración con la administración y, aunque asegura que los usuarios están "bien atendidos", no descarta intervenir en ellos en caso de ser necesario en esta crisis del COVID-19, si bien lo haría "en connivencia" con las entidades.

El director general de Políticas Sociales, Julio Soto, lo ha señalado así en una rueda de prensa junto a la directora general de Salud Pública, Paloma Navas.

El director general ha destacado el "excelente trabajo" de los centros y residencias de Cantabria, que atienden "con una dedicación por encima de lo normal" a las personas mayores.

Ha recalcado que los usuarios de los centros están "bien atendidos" a pesar de las "insuficiencias materiales".

El director general ha destacado que la Subdirección de Dependencia del Instituto Cántabro de Servicios Sociales (Icass) está "volcada" en el trabajo de seguimiento constante de todas las residencias de la región, con un equipo que trabaja a tres turnos "mañana, tarde y casi noche".

Según ha abundado, hay un contacto permanente con las residencias, a las que se mandan normativas y protocolos y con dedicación "total" al seguimiento del impacto del COVID-19.

El Icass también se ha ocupado del reparto de material de protección que va llegando y hoy mismo, ha añadido, se han repartido 3.000 mascarillas a los centros y mañana se distribuirán otras 10.000.

También hay pedidos, que suponen otras 28.000 que llegarán en los próximos días, y "a medida que vaya llegando más material se irá repartiendo", ha dicho Soto, que ha manifestado que, además de mascarillas, precisan la donación de batas.

Paloma Navas ha remarcado que se intenta hacer un reparto "equitativo" del material y que los equipos de protección se entregan en función del tamaño de las residencias.

La directora general ha asegurado que se está trabajando "intensamente", tanto Salud Pública como el Icass y las residencias, para limitar el número de contagios en estos centros y ha confiado en que se produzca el menor número posible.

"Sabemos que al ser una población especialmente vulnerable y con un estado de salud muy deteriorado es un nicho especialmente sensible a la infección y que puede tener un desenlace negativo", ha reconocido.

Soto ha reiterado la colaboración de las residencias y ha rechazado que se haya producido ocultamiento o falseamiento de datos de contagios de coronavirus en estos centros para proteger su marca.

"Todo lo contrario", ha subrayado, antes de señalar que las residencias informan a la familiares del paciente afectado de coronavirus y también al resto de familias para que, en caso de estar libres de COVID-19, puedan llevarse al interno al domicilio.

La comunicación es "muy estrecha y muy directa", ha resaltado la directora de Salud Pública.

Con todo, el director de Políticas Sociales ha afirmado que están sopesando todas las posibilidades y que la Consejería no descarta tomar las riendas centros si fuera necesario por el impacto del coronavirus, poniéndose en el peor escenario.

Según ha considerado, hay que ponerse "en lo peor", pensar en esa circunstancia "extrema" y en qué medidas se adoptarían. "Esa posibilidad es una posibilidad que se considera y lógicamente lo haríamos de la mano y en connivencia con las entidades", ha dicho Soto, que ha recordado que en Cantabria, donde hay cerca de 80 centros, todos son privados excepto 3.

Cualquier decisión en ese sentido se haría junto a Sanidad.

El director general ha insistido en que Cantabria fue una de las primeras comunidades en tomar medidas frente al coronavirus en el ámbito de las residencias y centros de mayores, porque se limitaron las visitas y se han aplazado los nuevos ingresos hasta que no pase esta crisis.

La gerente de atención primaria del Servicio Cántabro de Salud, Alicia Gómez, ha defendido la actuación de los sanitarios al atender las necesidades asistenciales de los pacientes ingresados en residencias.

"Atendemos a toda la población con los mismos criterios y quizás con un poco más de sensibilidad a esta población", ha recalcado Gómez, que, para reforzar sus palabras, ha dicho que del 3 al 23 de marzo se movilizaron 313 recursos para usuarios de residencias, 13 de ellos UVI, 145 ambulancias, 138 médicos que se han desplazado a los centros y 15 enfermeras.

"Se movilizan los recursos independientemente de la percepción. Yo entiendo que vivimos un momento muy diferente a lo que estamos habituados, y entiendo que muchas veces los gerentes de los centros se ponen nerviosos cuando los pacientes tienen algún síntoma y llaman y a veces los sanitarios valoramos esos síntomas y en función de eso se decide la movilización de recursos", ha comentado, en referencia a las críticas de algún responsable de residencias a la atención sanitaria. 

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