29.03.2024 |
El tiempo
viernes. 29.03.2024
El tiempo
El Diario de Cantabria

Exigen más protección y medios

Médicos y enfermeros piden que se supervise el material y la realización de test a los profesionales

Exigen más protección y medios

Los colegios de Enfermería y Médicos de Cantabria apoyan a sus Consejos Generales y exigen, tanto al Gobierno central como al autonómico, que supervisen el material de protección frente al Covid-19 «para que no haya ni un error más», así como para que se realicen tests a todos los sanitarios. En un comunicado, los presidentes de los colegios de Enfermería y de Médicos de Cantabria, Rocío Cardeñoso y Javier Hernández de Sande, respectivamente, han dejado patente su apoyo a los Consejos Generales de ambas profesiones y han subrayado que, aunque en Cantabria «aún no ha habido ningún caso de muerte de profesional sanitario» por contagio de Covid-19, «no están dispuestos a que lo haya por no haber contado con la protección adecuada ni con la información de si tiene o no la infección por la falta de pruebas diagnósticas».

Por ello, ambos presidentes han solicitado una actuación «inmediata» de la Consejería de Sanidad para que «se pongan todos los medios necesarios para el buen desarrollo del trabajo de los profesionales de la salud». En su nota de prensa, los colegios profesionales cántabros han recordado que la retirada de una nueva partida de mascarillas en varias comunidades autónomas que no cumplían la normativa y que ya habían sido utilizadas por profesionales sanitarios ha desencadenado una batería de protestas de médicos y enfermeras que se han plasmado en comunicados de los Consejos Generales de ambas profesiones.

Y es que, en la actualidad, los contagios a profesionales se siguen disparando. En España, según el Ministerio de Sanidad, hay 30.663 sanitarios infectados, lo que supone el 16% de los casos confirmados en el país. Para las entidades colegiales, estas cifras son «alarmantes» y sitúan al país en el primer puesto del ranking europeo con más profesionales de la salud contagiados. En Italia ha habido 17.000 sanitarios infectados por coronavirus y en Alemania 7.000. Los colegios de Médicos y Enfermería de Cantabria consideran «inadmisible» esta situación y se suman a las solicitudes de sus Consejos Generales.

acusación particular. Así, el de Médicos ha anunciado que se personará como acusación particular en aquellos casos de contagio derivados del uso de las mascarillas defectuosas. Además, exige que la infección por SARS-CoV-2 y sus secuelas sean reconocidas como accidente de trabajo y la realización de forma inmediata de test a todos los profesionales sanitarios para la necesaria seguridad de pacientes y profesionales como requisito esencial para seguir trabajando.

Por su parte, el Consejo General de Enfermería asegura que la gestión que está llevando a cabo el Gobierno es «caótica y absolutamente descoordinada», y exige al Ministerio de Sanidad que «profesionalice de una vez por todas las gestiones de la pandemia», impulsando una coordinación «real» entre las comunidades autónomas.

Además, al igual que los médicos, los enfermeros exigen que se hagan test a todos los sanitarios para evitar más contagios y contar con el material de protección adecuado, al tiempo que destacan la «enorme desprotección» que sufren cuando trabajan en esas condiciones en primera línea de fuego.

ATI. Por otra parte, el sindicato ATI ha denunciado a la Gerencia del Hospital Valdecilla ante la Inspección de Trabajo por «no proporcionar» equipos de protección «adecuados» a los celadores, «los grandes olvidados» en las medidas frente al coronavirus a pesar de tener «contacto directo» con los pacientes. ATI se ha quejado del «abandono» que sufren estos trabajadores por parte de la dirección del centro sanitario, a la que ha acusado de «poner en riesgo su salud y la de quienes les rodean» debido al elevado contagio del Covid-19.

En un comunicado, señala que los celadores de la puerta de Urgencias de Valdecilla son «los primeros» en recibir a los enfermos que llegan en ambulancia o coche particular, «sin saber si tienen coronavirus o no» debido a la «falta» de test. El sindicato agrega que, a continuación, les ayudan a sentarse en la silla de ruedas o camilla para adentrarlos después en urgencia donde, tras pasar por un triaje, les conducen a un box de reconocimiento y a los diferentes servicios para la distintas pruebas. También les llevan a salas vigiladas o plantas de hospitalización, al igual que hacen cuando reciben el alta, «realizando todas esas maniobras en contacto directo con los pacientes», el mismo que tienen los celadores de quirófanos con los pacientes antes y después de una intervención.

Y los que trabajan en planta colaboran en tareas como aseos o movilización de pacientes, y se encargan también ante un fallecimiento de introducir el cuerpo inerte -que es cuando más carga viral desprende- en una bolsa sanitaria biodegradable para su traslado al depósito. En las Unidades de Cuidados Intensivos (UCIs) se encargan de asear a los ingresados y colaboran con el personal de enfermería.

Pero a pesar de este contacto «estrecho y directo» con los pacientes el celador es «el gran olvidado a la hora de proteger su integridad física» debido, según ATI, a que «el hospital no le proporciona el suficiente equipo de protección individual que le garantice de forma segura su exposición al coronavirus a la hora de realizar su trabajo».

Esto hace que desarrollen su labor «con tensión y poniendo en peligro su salud y la de cuantos le rodean», insiste el sindicato.

Exigen más protección y medios
Comentarios