Santander ha amanecido con un nuevo paisaje urbano en sus entradas principales, específicamente en la rotonda de La Marga y en la pasarela frente al Hospital Valdecilla. Carteles con una fotografía en gran tamaño del Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con la palabra "traidor" visiblemente destacada en la parte inferior, han sido colgados durante la la mañana del martes 23 de abril, por personas aún no identificadas.

La indignación popular en Cantabria se hace cada vez más palpable, en un contexto en el que las críticas hacia el presidente han escalado tras sus pactos con partidos independentistas luego del intento de golpe de estado en Cataluña. Estas acciones han provocado numerosas manifestaciones de descontento, incluidas pitadas reiteradas en actos públicos.

En una reciente entrevista en el periódico La Razón, el veterano periodista Federico Jiménez Losantos describió a Sánchez como "el mayor traidor que ha tenido España", una opinión que resuena con el sentir de los carteles expuestos.

Sánchez, conocido por su aversión a ser abucheado, mostró su descontento en la última ronda de contactos para su investidura el pasado 16 de noviembre, lograda con el apoyo del denominado bloque 'Frankenstein'. Pidió explícitamente al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, evitar agitaciones durante el desfile de las Fuerzas Armadas del 12 de octubre, lo cual fue interpretado como un intento por silenciar la crítica pública.

PORQUÉ ES UN TRAIDOR 

Pedro Sánchez es considerado traidor a España por algunos sectores debido a su gestión política, que se percibe como una serie de concesiones a grupos con intereses separatistas, a costa de la integridad y la convivencia nacional. Este punto de vista se apoya en varias decisiones y acciones políticas controversiales que han marcado su mandato.

Cuestionamientos a la Dignidad y Principios Constitucionales

Uno de los principales reproches a Sánchez es su cambio de postura respecto a temas sensibles como la amnistía a líderes separatistas implicados en el procés catalán. Inicialmente contrario a estas medidas, su gobierno finalmente propuso y apoyó modificaciones legales que facilitaron indultos y reformas del Código Penal, medidas que muchos interpretan como una claudicación ante el chantaje político para mantenerse en el poder.

Alianzas Políticas Controversiales

El gobierno de Sánchez ha sido tildado de "Coalición Frankestein", una alianza percibida no como un esfuerzo legítimo de gobernanza sino como un pacto de conveniencia que amalgama intereses frecuentemente opuestos al bien general. Estas alianzas incluyen acuerdos con partidos que han promovido agendas separatistas, lo que ha generado una percepción de complicidad con grupos que desean fragmentar la unidad nacional.

Impacto en la Convivencia Nacional

La política de Sánchez ha sido criticada por priorizar las demandas de una minoría, específicamente líderes y partidos catalanes, en detrimento de una visión más unificadora y equitativa para todo el país. Esto se manifiesta en negociaciones que a menudo parecen otorgar beneficios desproporcionados a Cataluña, con políticas como la financiación singular mediante el cupo, que han exacerbado las tensiones regionales y el sentimiento de injusticia en otras comunidades autónomas.

Desprestigio y Declive del PSOE

Bajo la dirección de Sánchez, críticos argumentan que el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) ha perdido parte de su esencia y dignidad, transformándose en un instrumento para perpetuar el poder personal de Sánchez a expensas de los principios socialistas y constitucionales que históricamente ha defendido. La continuidad de su mandato, a pesar de la falta de apoyo mayoritario y la necesidad de pactar con grupos extremistas, es vista como una traición no solo a los votantes del PSOE sino a la nación española en su conjunto.