A decir verdad, no fue un buen partido del GA Cantabria. Lo avisaba David Mangas en los días previos al encuentro. No iba a ser un partido fácil, Aquimisa Carbajosa venía de dos derrotas muy duras y se había reforzado mucho de cara a este enfrentamiento.

Si a esto le sumas una dosis de motivación extra por recibir a uno de los equipos de arriba, la ecuación es perfecta para un encuentro muy complicado ante uno de los equipos que más sorprendió en el inicio de temporada. GA Cantabria comenzó bien el encuentro, controlando el tempo del partido y haciendo el tipo de juego que gusta a los de Mangas. Con un 2-7 inicial, se atascó y recibió un 8-0 en contra.

Pero el conjunto cántabro reaccionó bien con la salida de Fernando Sierra que fue un revulsivo para un GA Cantabria atascado. En combinación con Carlos Toledo, rompieron la defensa rival con un parcial de 0-12 para voltear de nuevo el encuentro e irse al final del primer cuarto con un 9-19 en a favor.

A partir de ahí, el GA Cantabria fue cayendo en barrena en las garras de Aquimisa Carbajosa que consiguió imponer su ritmo de juego y atascar al conjunto visitante en la defensa que plantearon los jugadores salmantinos. GA Cantabria tuvo verdaderos problemas para producir en ataque, sobre todo en la búsqueda de puntos en la pintura, en un partido donde el tiro de tres predominó. Tom Granado sólo dispuso de 7 tiros y Leo Cizmic apareció en el segundo cuarto y volvió a desaparecer.

En el segundo acto, Leo Cizmic asumió el protagonismo, con 9 puntos en el periodo. Junto a Álvaro Palazuelos fueron los que consiguieron anotar en un cuarto muy trabado que ya empezó a apuntar el devenir del encuentro. Ventaja recortada hasta el 31-36 con un GA Cantabria que encajó un 8-0 de parcial para volver a meter a los salmantinos en el encuentro.

El tercer acto del encuentro, fue para olvidar. Comenzó bien el GA Cantabria con 3 tantos de Walter Junior, pero no volvió a anotar en los 4 minutos siguientes, encajando un 10-0 de parcial. Aquimisa Carbajosa consiguió dar la vuelta al partido, y granito a granito ir sumando puntos para marchar al final del cuarto con un nuevo parcial de 8-3 y 55-47 en el marcador. 13 puntos fueron los que consiguieron (5 que remontaron y 8 que abrieron de brecha).

A partir de ahí, descontrol. El GA  Cantabria le perdió el pulso al partido, y el último cuarto fue una maraña de errores y de desacierto que llevó a los visitantes a tirar cerca de 40 triples de los que sólo anotó 11. Y no, no se puede ganar un partido con casi 40 triples lanzados.