Sánchez arrancará el 40º Congreso del PSOE escenificando imagen de "unidad" con sus ministros y 'barones' autonómicos

Felipe González, José Luis Rodríguez y Joaquín Almunia, con los que Sánchez ha contactado personalmente, intervendrán el sábado

Felipe González, José Luis Rodríguez y Joaquín Almunia, con los que Sánchez ha contactado personalmente, intervendrán el sábado

MADRID, 29 (EUROPA PRESS)

El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, arrancará el 40º Congreso Federal de su partido el viernes 15 de octubre en Valencia con un encuentro a medio día en el que participarán los ministros del ala socialista del Ejecutivo, los presidentes autonómicos y los secretarios generales de las distintas federaciones, según informan fuentes socialistas, en un claro intento de marcar la que será la pauta de este cónclave: la "unidad" dentro del partido y el papel que juega ahora el PSOE como fuerza de gobierno.

Estas serán las dos claves de este congreso, que durará hasta el domingo 17, y que de hecho contará con la participación el sábado de los ex secretarios generales socialistas José Luis Rodríguez Zapatero, Joaquín Almunia e incluso Felipe González, a pesar de los reproches que este último ha lanzado en público a Sánchez. Fue el propio presidente el que contactó con ellos para invitarles personalmente a participar en el congreso, según las fuentes consultadas.

A falta de que los organizadores terminen de cerrar la escaleta, la previsión es que la agenda comience el viernes a medio día con un encuentro del denominado Consejo de Política Federal --el órgano territorial del PSOE, en el que se integran todos los secretarios generales autonómicos--, presidido por Sánchez y con la participación también de los ministros socialistas --incluso los que no tienen el 'carnet' de militante--.

De ahí saldrá la primera foto de esa "unidad" de la que Sánchez quiere hacer gala, en un cónclave en el que precisamente no se esperan ni tensiones ni disputas, y al que el presidente llega ya con su cargo reafirmado, tras unas primarias breves y de trámite, sin votación, en las que él fue el único candidato. Es decir, la única "sorpresa" que se espera es que "no va haber sorpresas", en palabras de un dirigente socialista.

Ya el sábado se espera que los órganos federales salientes presentes su informe de gestión. A lo largo de la mañana se producirán también las intervenciones, por un lado, de los dos expresidentes González y Zapatero, y por otro, de Almunia. Todo ello antes de que arranque ya por la tarde el debate de las enmiendas a la ponencia marco, que servirá para fijar los nuevos postulados del PSOE en esta nueva etapa que se abrirá tras la cita de Valencia.

El procedimiento para desarrollar este debate será el habitual: primero se debatirán las enmiendas a la ponencia marco en las distintas comisiones a puerta cerrada y, en el caso de que alguna logre la mayoría necesaria para ser aprobada --el 20%--, se debatirá en abierto en el Plenario.

Las Federaciones y agrupaciones sectoriales todavía tienen hasta el 3 de octubre para remitir a Ferraz las enmiendas debatidas y aprobadas en los proceso precongresuales. Después, será el momento decidir cuáles de ellas se transaccionan e incorporan al texto de la ponencia marco, y cuáles llegan vivas para su debate durante el congreso de Valencia.

Por ejemplo, la corriente interna Izquierda Socialista ha planteado, una vez más, su propuesta para que se debata la instauración en España de una República Federal Laica, en una de las casi cien enmiendas que ha presentado y a las que ha tenido acceso Europa Press. Una enmienda que podría resultar polémica porque plantea realizar un referéndum consultivo para iniciar una reforma de la Constitución en ese camino a la República que plantean.

Otro de los temas que podrían ser objeto de debate, si prosperan las enmiendas que se están presentando en las agrupaciones, es la cuestión trans, que divide al movimiento feminista y también al PSOE, como se ha demostrado recientemente en la negociación con Unidas Podemos para la ley Trans. El Gobierno aprobó en junio este anteproyecto con la libre determinación de género, en contra de los postulados defendidos, entre otras, por la entonces vicepresidenta primera, Carmen Calvo.

EJECUTIVA REDUCIDA, RENOVADA, JOVEN Y CON GRAN PRESENCIA DE MUJERES

Por último, el PSOE cerrará su congreso el domingo con la intervención final del líder socialista y la votación tanto de la ponencia marco que resulte de todos los debates como de la nueva Ejecutiva que diseñe Sánchez para esta nueva etapa.

Su intención, según explican fuentes socialistas, es que la nueva dirección sea más operativa y de un tamaño bastante más reducido que la de ahora. A diferencia del anterior congreso de 2017, cuando Sánchez logró hacerse otra vez con el control del PSOE tras haber sido descabalgado en 2016 por negarse a permitir la investidura de Mariano Rajoy, el líder socialista llega a la cita de Valencia libre de ataduras y favores que devolver.

También se prevé que Sánchez presente una Ejecutiva muy renovada, con dirigentes jóvenes, procedentes del municipalismo, y gran presencia de mujeres --fuentes consultadas por Europa Press señalan que podrían llegar a ser el 60% de los miembros del nuevo equipo del secretario general--.

Es decir, las mimas ideas que ya guiaron al presidente en la intensa crisis de gobierno que acometió en julio, y que supuso la salida, entre otros, de algunos pesos pesados como la entonces vicepresidenta primera Carmen Calvo, el que fuera ministro de Transportes y también secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, o el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo.

Lo único que está claro por el momento es que la actual vicesecretaria general, Adriana Lastra, seguirá en su cargo como 'número dos' del partido. También se da por hecho la continuidad de Santos Cerdán al frente de la secretaría de Organización, un cargo que asumió en julio tras la salida Ábalos tanto del Gobierno como del partido.

Por otra parte, varios de los dirigentes consultados por Europa Press creen que Sánchez podría cambiar también a la actual presidenta del partido, Cristina Narbona, y darle este cargo, que tradicionalmente tiene un carácter honorífico, a la exvicepresidenta Calvo, en compensación por su salida del Gobierno.

El congreso de Valencia supone de hecho la culminación de la estrategia de renovación del partido que Sánchez ya inició con la mencionada crisis de gobierno, en la que le devolvió al PSOE el protagonismo en Moncloa. El ejemplo más claro fue la salida de su entonces jefe de gabinete Iván Redondo, y la llegada a este cargo de Óscar López, quien fuera secretario de Organización del partido bajo el liderazgo de Alfredo Pérez Rubalcaba.