La obra estaba en un vestíbulo de Sarrià y los vecinos supuestamente planeaban eliminarla

BARCELONA, 28 (EUROPA PRESS)

Los Mossos d'Esquadra investigan la destrucción de un mural del artista Josep Guinovart de los años 50 que terminó cubierto por una capa de pintura y parcialmente derruido durante la reforma de un edificio del barrio barcelonés de Sarrià.

En un comunicado este viernes, la policía catalana ha explicado que investiga a la comunidad de propietarios y al arquitecto responsable de la reforma por un presunto delito contra el patrimonio histórico.

La investigación arrancó en mayo de 2021, cuando la unidad de Patrimonio Histórico de los Mossos tuvo noticia, a través de las redes sociales y medios de comunicación, de la presunta destrucción del mural de Guinovart en ese edificio; la fundación Josep Guinovart también denunció los hechos.

Situada en el vestíbulo, la pintura medía 2,95 por 7,50 metros y forma parte de un conjunto catalogado en el libro 'Guinovart: l'art en llibertat' que acompaña a una escultura que representa una sardana en el mismo espacio.

Los investigadores averiguaron que la comunidad de propietarios presuntamente había decidido no conservar la obra del artista en la reforma, que iba a comportar la "destrucción y desaparición del mural".

Así, supuestamente las obras buscaban eliminar una parte de ese mural para mejorar visualmente la zona de la portería, y el plan era eliminar también la escultura para habilitar en su lugar una zona de aparcamiento de motos.

Tras recibir una visita de los agentes y saber de la denuncia de la fundación, los investigados contrataron un servicio de restauración para eliminar la pintura acrílica y rehacer la parte derruida, intentando imitar el lenguaje artístico de Guinovart --una técnica que recibe el nombre de 'falso histórico--.

ARREGLOS

Según han explicado los Mossos, esta obra de Guinovart no está protegida de forma individual, pero sí tiene una "valoración de antigüedad" al amparo de la normativa europea, lo que la convierte en una obra emblemática y singular.

Tras revisar documentos municipales, las actas de la comunidad y escuchar a los testigos, la policía ha concluido que los investigados cometieron "una imprudencia grave con la clara intención de deshacerse de la obra".

Por ello se exponen a posibles responsabilidades penales por presuntos delitos contra el patrimonio histórico, castigados con multas y penas de cárcel que pueden llegar a los tres años.

Los daños causados son irreparables, según la Fundación Guinovart, y la restauración dificultará cualquier recuperación; los directores de museos como el MNAC o el Museu Picasso, además del Gremi de Galeries d'Art de Catalunya, entre otros, "han puesto de manifiesto el destrozo que se ha hecho con esta obra", explican los Mossos.