MADRID, 22 (EUROPA PRESS)

Los funcionarios de prisiones han incautado 10.275 teléfonos móviles en los últimos cinco años en las inspecciones realizadas dentro de las cárceles españolas para detectar este tipo de objetos prohibidos, según datos de los sindicatos ACAIP-UGT.

El año con mayor número de aprehensiones fue 2019 con 2.585 teléfonos móviles, manteniéndose cifras similares en 2020 y 2021. Los centros terminales de Algeciras y Málaga, con cerca de 700 terminales cada uno, serían las cárceles con mayor número de confiscaciones.

Las organizaciones ponen en valor el trabajo de los funcionarios de prisiones para detectar los teléfonos móviles, en muchas ocasiones de pequeñas dimensiones. Se trata de un objeto muy cotizado, "generando un mercado negro con los problemas regimentase que esto genera".

ACAIP-UGT recuerda que, en muchas ocasiones, los teléfonos son utilizados dentro de las cárceles para continuar con la actividad delictiva por la que se cumple condena.

Destacan que, por su reducido tamaño, se han hallado en lugares como interior de suelas de zapatos, botes de refresco o en productos higiénicos. Los sindicatos recuerdan la necesidad de realizar inspecciones exhaustivas, de ahí que denuncien las 3.000 vacantes en Instituciones Penitenciarias.

"Las nuevas promociones apenas cubren las bajas vegetativas", alegan, "por eso es preciso adaptar el organigrama de los centros a las nuevas formas de delincuencia y retomar la negociación de la Ley de Función Pública", concluyen.