SAN SEBASTIÁN, 4 (EUROPA PRESS)

La Guardia Civil ha detenido a un conductor acusado de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros tras interceptar el vehículo que conducía y en el que iban otros seis ocupantes migrantes, dos mujeres y cuatro menores a su cargo, con el que pretendía pasar ilegalmente la frontera con Francia en la localidad guipuzcoana de Irun.

Según ha informado la Delegación del Gobierno central en Euskadi, un dispositivo de la Guardia Civil desplegado en la frontera hispano-francesa ha dado como resultado la detención de una persona cuando pretendía introducir ilegalmente a seis personas en territorio francés.

Agentes de la Guardia Civil que vigilaban zonas sensibles para el paso de inmigrantes clandestinos en el entorno del río Bidasoa, a su paso por el término municipal de Irun, observaron durante un operativo nocturno como un grupo de seis personas se escondían en una un área cercana a la carretera que bordea la frontera.

Una vez controlado el lugar de ocultación de este grupo, los agentes pudieron localizar un vehículo que circulaba por la zona realizando varios recorridos por la misma carretera. Mientras controlaban al vehículo comprobaron como éste se ocultaba en un punto cercano y oscuro próximo al lugar donde se hallaban los inmigrantes. Durante un cierto tiempo, el vehículo permaneció en el lugar, y los policías advirtieron que su ocupante "permanecía en actitud de vigilancia y espera".

Finalmente el vehículo se trasladó al lugar en el que estaban las personas ocultas, quienes se introdujeron rápidamente en el turismo, y como a continuación circulaba dirección Francia.

Los guardias civiles interceptaron el vehículo a escasos centenares de metros de la frontera y pudieron comprobar como en el mismo viajaban el conductor y seis ocupantes más. Los inmigrantes identificados resultaron ser dos mujeres con cuatro menores a su cargo.

Identificado el conductor, de nacionalidad senegalesa, éste tenía antecedentes por hechos similares, por lo que fue detenido por un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros y puesto a disposición judicial. Las mujeres y sus hijos, todos ellos procedentes de Costa de Marfil, se hallaban "en buen estado de salud y tras realizarse los correspondientes trámites de extranjería fueron puestos en libertad".