Pedro Casares, destacado diputado socialista, ha lanzado un desafío directo al líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, exigiendo una condena firme y contundente ante los recientes y escandalosos insultos del presidente argentino Javier Milei hacia Pedro Sánchez y su familia.

Casares, desde su cuenta de X (antes conocida como Twitter), ha sido claro y directo: "Esperamos la reacción de condena de Feijóo y el PP ante los insultos de Milei a Sánchez y su familia. Lo contrario será blanquear de nuevo a la ultraderecha, que es un peligro para las democracias". Según el diputado socialista, el silencio o la inacción del Partido Popular solo puede interpretarse como un peligroso consentimiento hacia un discurso que amenaza los valores democráticos fundamentales.

Este episodio se enmarca en una serie de declaraciones incendiarias que comenzaron con el ministro de Transportes, Óscar Puente, quien en una mesa redonda sobre comunicación y redes sociales en la Escuela de Gobierno Luis Tudanca del PSOE de Castilla y León, arremetió duramente contra Milei. Puente insinuó que el presidente argentino había consumido drogas, declarando que al verlo en televisión pensó: "¿Os acordáis cuando salió, no sé en qué estado y previa a la ingesta o después de la ingesta de qué sustancias?". Estas palabras, lanzadas con agresividad e ironía, no solo buscaban desacreditar a Milei, sino también poner en entredicho su capacidad para liderar Argentina.

Óscar Puente, conocido por su estilo mordaz en redes sociales, defendió su postura alegando que en plataformas como X es necesario un toque de sinceridad y concreción que a menudo se confunde con agresividad. "No tengo por qué cortarme a la hora de expresarlo. Lo hago especialmente en las redes sociales, empleo un punto de agresividad; en las redes se juega duro y, si no juegas duro, pasas desapercibido y eres irrelevante", afirmó Puente, en un intento de justificar sus polémicas declaraciones.

Pedro Casares, PhD y profesor de Economía en la Universidad de Cantabria, insiste en que estos ataques no son más que una manifestación del odio y la retórica destructiva de la ultraderecha, que según él, debe ser firmemente condenada. "La ultraderecha, con su retórica incendiaria, amenaza los valores fundamentales de nuestras democracias", enfatizó Casares, señalando la urgencia de una respuesta contundente por parte del Partido Popular.

La cuestión ahora es si Feijóo y el PP estarán a la altura de las circunstancias y tomarán una posición clara contra los insultos de Milei, o si, por el contrario, el silencio se interpretará como una preocupante complicidad con la ultraderecha. España y sus ciudadanos esperan respuestas claras en un momento en el que la integridad democrática está en juego.