Una delegación de altos directivos pertenecientes al STC Group sostuvo una reunión con el presidente de Telefónica, José María Álvarez Pallete. El motivo principal de esta reunión fue la exploración de estrategias relacionadas con la inversión del STC en Telefónica, coincidiendo con la proximidad de la junta de accionistas, una cita anual clave para la compañía y sus inversionistas, habitualmente celebrada en el mes de abril.

Aunque tanto el grupo saudí como Telefónica han optado por mantener un perfil bajo en cuanto a comentarios, fuentes cercanas a la situación confirmaron a El Mundo la realización de este encuentro estratégico, en primera instancia adelantado por El Independiente. La importancia de esta reunión se magnificó debido a la fuerte presencia del grupo árabe en España durante la semana, destacando como el principal patrocinador del Mobile World Congress y compartiendo espacio en la misma feria con el expositor de Telefónica.

STC Group, mediante sus instrumentos financieros, controla actualmente un 4,9% de las acciones de Telefónica y ha expresado su intención de incrementar esta participación hasta el 9,9%. Para materializar este aumento, la empresa requerirá la autorización del Ministerio de Defensa, un proceso que suele demorar aproximadamente tres meses. Sin embargo, cabe señalar que la probabilidad de que este trámite se agilice incrementa a medida que el Estado adquiere participación en el capital de Telefónica, garantizando un equilibrio de fuerzas en el accionariado junto al núcleo de accionistas nacionales.

En el reciente informe anual publicado por STC Group, se estima un plazo de un año para la ejecución de este acuerdo y se revela que la empresa ha recibido dividendos por un total de 42 millones de euros en el último trimestre. Además, la empresa ha manifestado públicamente su respaldo al equipo directivo de Álvarez Pallete y a la estrategia del grupo, delineada en el plan estratégico denominado GPS, presentado en noviembre del año anterior.

La posible ampliación de la participación de STC en Telefónica, además de sus implicaciones financieras, conlleva la discusión sobre la reconfiguración del consejo de administración. La llegada del gobierno y la necesaria autorización para la presencia del grupo saudí en dicho órgano podrían desembocar en una remodelación, permitiendo la inclusión de representantes de accionistas. Se plantea la posibilidad de que, al menos, un titular de cada accionista, en línea con CaixaBank y BBVA, obtenga un puesto en el consejo. Para facilitar esto, sería necesario que algunos independientes abandonen el consejo, siendo cuatro de ellos cuyos mandatos vencen en la próxima junta de accionistas.

No obstante, la incertidumbre persiste en torno a la operación, ya que ni el gobierno, que aún evalúa con qué entidad llevará a cabo la operación, ni el STC, debido a los trámites de autorización, parecen estar preparados para reclamar un asiento en el consejo en el corto plazo. Si se proyecta la mirada hasta el año 2025, la única consejera cuyo mandato vence es Carmen García de Andrés.

En conclusión, este encuentro estratégico entre STC Group y Telefónica no solo aborda el futuro de la inversión en la empresa de telecomunicaciones, sino que también plantea la posibilidad de cambios significativos en la estructura del consejo de administración, lo que podría tener implicaciones a largo plazo en la dirección y toma de decisiones de Telefónica. La espera se torna esencial para observar cómo se desarrollan los próximos movimientos en este juego estratégico entre inversores y la compañía.