El Valencia Basket se encuentra en un estado de máxima alerta ante la inminente visita del Maccabi Tel Aviv, en un partido que ha sido designado como de "alto riesgo". Esta preocupación se debe al contexto actual de conflicto entre Israel y Hamás, que ha generado una escalada de violencia en Oriente Medio y ha tenido repercusiones en Europa, incluyendo España, que se encuentra en nivel 4 de alerta antiterrorista.

Ante esta situación, el Valencia Basket ha tomado medidas adicionales para garantizar la seguridad de los asistentes al partido que se jugará en La Fonteta. Se desplegarán 700 agentes de seguridad en el estadio y se realizarán exhaustivos controles a todos los espectadores. La apertura de puertas se adelantará a las 19:00 horas para evitar posibles aglomeraciones.

El club valenciano ha recordado a los aficionados la vigencia de la Ley 19/2007 contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte. Esta ley prohíbe la entrada de armas, petardos y cualquier objeto que pueda generar humo, así como la exhibición de pancartas, banderas o símbolos que inciten a la violencia. Además, se advierte contra cualquier conducta violenta, racista, xenófoba o intolerante.

Es esencial destacar que, al ingresar al estadio, los espectadores están obligados a someterse a registros personales y a ser grabados por circuitos cerrados de televisión en los alrededores del recinto, en los accesos y en el interior del mismo. Esta serie de medidas se han implementado para garantizar la seguridad de todos los asistentes en medio de este contexto de máxima alerta.